Era el último récord individual del mejor nadador de todos los tiempos que aún contenía, el que además habrá durado más tiempo en la historia de la natación. Michael Phelps -28 medallas olímpicas, incluidos 23 títulos entre 2000 y 2016- la había establecido en los Juegos de Pekín de 2008. Quince años después, el francés Léon Marchand borró la marca de la leyenda estadounidense en los 400 metros combinados, el domingo 23 de julio, en el mundial de Fukuoka (Japón).
El tolosano de 21 años asestó un duro golpe nada más entrar en la carrera a pie en el caldero de la Marine Messe, con un tiempo de 4 min 02 s 50 (frente a los 4 min 03 s 84 del ex nadador de Baltimore). Como un guiño del destino, fue en esta ciudad portuaria en el extremo norte de la isla de Kyushu, en el suroeste del archipiélago japonés, donde Phelps había ganado su primer título mundial en 2001, en los 200 m mariposa, batiendo su propio récord mundial de distancia establecido unos meses antes con solo 15 años. Léon Marchand aún no había nacido.
El sábado, en la víspera de zambullirse en la piscina Marine Messe en Fukuoka, el protegido de Bob Bowman y Nicolas Castel se puso en contacto ya que el microcosmos de la natación le había prometido durante meses romper este récord el domingo. “Ese no es mi objetivo principal. Intentaré hacerlo lo mejor posible y ya veremos». evacuó al nadador de 21 años, sin que mucha gente convenciera. «Quiero ganar un título en el campeonato mundial, eso es todo», reaccionó el mediodía del domingo justo después de su serie, donde había logrado el segundo mejor tiempo (4 min 10 s 88, por detrás de los 4 min 9 s 83 del estadounidense Carson Foster), gestionando su final de carrera.
Ya en 2022, en el Mundial de Budapest, la máquina de Marchand había acariciado por primera vez la referencia sagrada, en 4 min 04 s 28. Desde entonces -y esto se vio el domingo por la tarde- ha mejorado en espalda, también en crol.
Según él, este primer disco del mundial a la distancia sin duda no es el último. “Ya sea que suceda mañana o dentro de un año, no cambia, será un paso en mi viaje. Si quiero lograr mi objetivo principal, necesito «soplar» los 4 min 4 s, los 4 min 3 s, dijo el sábado. Es bastante especial porque es el último de Michael. »
En el Mundial de Budapest, el hijo pródigo de la natación francesa, exiliado en Arizona desde agosto de 2021, había conquistado dos títulos en los 400m combinado y 200m combinado, además de una medalla de plata en los 200m mariposa. En Fukuoka participa en cuatro carreras individuales, las mismas que en la capital húngara, pero también en los 200 metros braza donde estuvo cerca del récord mundial durante el campeonato de Francia en Rennes a mediados de junio (2 min 6 s 59, mejor tiempo mundial de la temporada).
Al incluir los 400 metros combinados desde el primer día de competición, el calendario del Mundial va bien, porque los Blues, gracias a su barco Marchand, ya van por buen camino.